El Centro Provinciale d´Istruzione per gli Adult Provinciale en Mamome es una prisión construida en 1918, de régimen abierto en Cerdeña, Italia. En ella, los 150 internos trabajan de 3 a 5 horas en distintas labores de agricultura y ganadería, como en sus instalaciones, ya que cuenta con una estructura de produccíon quesera para el autoconsumo. Por ello reciben un sueldo con el que pagan a la Administración su manutención.

En el edificio principal se encuentra La Escuela, en una sección diferenciada, donde hay varias aulas. Cuenta con aula de informática, ordenadores portátiles, y un monitor digital interactivo sin acceso a internet. No está permitido la entrada de portátiles ni ningún otro dispositivo electrónico. Los profesores solo pueden utilizar papel, fotocopias y libros.

Lo más duro que se encuentran los internos que residen en esta prisión, es el aislamiento de cualquier núcleo habitado, por lo que impide las visitas de familiares. Es una de las pocas prisiones de Italia en las que se puede trabajar.

En toda Italia hay un total de 61.000 internos. Su principal problema es la súper población reclusa, la gran cantidad de horas que pasan en su celda y el alto índice de suicidio.

Encuentros personales
Estas instalaciones fueron visitadas en junio por cuatro profesoras del CEPA Yucatán (Centro de Educación para Personas Adultas) en una visita Erasmus, en la que también se reunieron con la Garante (Jueza de Vigilancia) de la prisión de alta seguridad de Nuoro, cuyo objetivo es tutelar todas las personas con privación de libertad y velar para que se cumplan todos los derechos. En esta prisión los internos realizan actividades educativas con los docentes del CIPA Nuori (el CEPA italiano) y Cáritas, que proporcionan atención en diferentes encuentros personales para hablar de sus necesidades. También realizan talleres de costura y elaboración de muñecas, donde los internos no se juntan y desarrollan las actividades y clases en su sección correspondiente.
Fotos: CEPA Yucatán