Paulino Alonso.
En la cárcel de Soto del Real hay dos cosas que todo el que la ha visitado o ha estado interno sabe que existen. Una es la torre y la otra es el padre Paulino, los dos son instituciones dentro de la prisión.
Lleva más de 29 años dedicándose a las prisiones, moviéndose entre los presos. Desde el 2 de mayo de 1998 es el capellán de Soto. Junto a otro capellán dan misa semanalmente a más de 300 personas.
Algunos dicen que es un personaje mediático, que le gusta moverse en esos ambientes. Él lo niega. Como buen fraile no lo podría reconocer. Otros directamente piensan que, en realidad, es un personaje.
“Me levanto por las mañanas pensado que hay personas que me necesitan y que puedo ayudar”
Los que residimos aquí de forma permanente tenemos que reconocer que tiene una habilidad que debe haber ido perfeccionando con los años. Que no es otra que a poco que te conozca sabe cuándo te encuentras bien o cuando tienes alguna preocupación o problema. Si algo puedes tener claro es que, tienes su hombro para poder acercarte y poder hablar con él, pedirle consejo o simplemente que te dirija una sonrisa, un insulto cariñoso o incluso un cachete y con eso ya tienes la sensación de que te ha cambiado el día.
Soy católico de los que asisten a misa todos los domingos y fiestas de guardar. Debo decir que el primer día que acudí a una misa salí un poco entre escandalizado y noqueado, no tenía muy claro que había pasado en la ultima hora de mi vida. Se me planteo una duda. ¿De verdad había estado en misa? ¿El señor que iba de blanco era el cura? Con el tiempo no solo lo entiendo, sino que comparto su forma de hacer Iglesia.
¿Quién es Paulino Alonso?
Paulino es una persona normal, de la vida normal que ha descubierto que Dios está con él y que le llama a poner su vida al servicio de los demás y se siente feliz tendiendo la mano a todo aquel que me necesita.
¿El niño Paulino que quería ser de mayor?
Nada, yo no sabía lo que quería ser. Yo estaba abocado a estar en mi pueblo, cuidando vacas o cerdos, labrando las tierras, que es lo que había en mi pueblo en aquella época. No se pensaba en nada.
¿De pequeño alguna vez pensó que iba a estar rodeado de presos?
Jamás en la vida, ni pensarlo. En un pueblo pequeñito de Zamora era impensable hablar de presos.
¿Cómo fue su infancia en un pueblo de Zamora?
La infancia en un pueblo de Zamora era siempre igual: jugar con los compañeros y amigos, ir a la escuela. Y en invierno como mucho ir a casa del que tenía televisión a verla. En invierno todo era alrededor del fuego por el frio que hacía.
¿Buen o mal estudiante?
Mal estudiante, malísimo.
¿Qué asignatura era la que más se le resistía?
Educación física, siempre me suspendían para septiembre.
¿Y la que más le gustaba?
Lenguaje, no me desagradaba
Hizo la mili ¿cómo calificaría esa experiencia?
Para mi fue muy positiva, me sentí feliz, ahora mismo la repetiría.
¿La implantaría otra vez?
No ahora mismo no. Considero que la mili era en algún sentido una pérdida de tiempo para mucha gente. Pero si la dejaría de carácter voluntario, para que fuesen los que quisieran.
¿Cuándo decido que quería ser religioso?
Fui a estudiar a Salamanca con 11 años a los Trinitarios y poco a poco fui descubriendo algo, a la vez que iba sintiendo algo. A los 18 años cuando estaba terminando COU ya decidí empezar el camino.
“Intento dar a los internos un poquito de calor humano, ese calor que no pueden dar los muros, ni el hormigón”
¿Vocación o devoción?
Vocación total y absoluta, yo por devoción no haría nada.
¿Fraile o cura?
Fraile
¿Por qué religioso Trinitario?
Por una circunstancia casual, cuando los frailes iban recorriéndose los pueblos, en aquellos años era muy típico, buscando vocaciones por aquel entonces de mi pueblo había 9 chavales estudiando en Salamanca, y en vez de ir a León con los Agustinos, preferí ir con mis amigos a Salamanca. Fue una casualidad totalmente.
¿Qué es lo que le hace levantarse todas las mañanas?
Pensar que hay gente que me necesita y a la cual le puedo ayudar.
¿Es fácil renunciar a muchas cosas que podría tener por dedicarse a los demás?
Es facilísimo si realmente estas convencido de lo que quieres hacer y de lo que estás viviendo.
Cuando me enteré que no tiene carnet de conducir y que por lo tanto no conduce me causó asombro y le di más mérito todavía. ¿Cómo es un día normal, entre semana en su vida?
Me levanto a las siete y media, a las ocho menos cuarto rezamos la oración de la mañana con los 6 frailes que vivo en comunidad, a las ocho y media desayuno, a las 9 organizo un poco lo que tengo que hacer en el día y sobre las diez menos diez llego al comedor Ave María. Ahí cuando llego atendiendo el final del desayuno, siempre hay alguien que me está esperando, lo atiendo y organizo un poco las cosas que tengo que ver allí. Después me dedico a los compromisos que tengo o bien de internos de Soto o de personas del comedor. Hasta la hora de la comida, a las tres me cojo el autobús para Soto. Pero siempre lo intento con una sonrisa y feliz.
Luego ya toda la tarde la paso en Soto, hasta las 8 y media que me vuelvo a coger el transporte público para Madrid. Paso por el comedor, si tengo algo que dejar o recoger algo y me voy a cenar a la comunidad. Ceno tarde, muy tarde.
“La primera vez que entré en la prisión de Carabanchel estaba acojonado, totalmente acojonado”
¿Es del Barça por polemizar o por creencia?
Por las dos cosas, aunque creo más en el Barça, que en el Madrid. A la vez me gusta meterme con los madridistas y crear un poco de polémica y ambiente. Hay que mantener a todo el mundo a la defensiva antes de la misa y el futbol es un buen instrumento. Luego ya empiezo a lanzar los mensajes que me interesa que se lleven para pensar en su modulo.
¿Cuándo decidió que quería o podía ser capellán de una prisión?
En la vida lo pensé, fue casual. Nos ofrecen la capellanía de la prisión de Carabanchel y para no perder la plaza decidí ir y no sé qué paso, que me engancho de tal manera que ahora sería una tragedia que me quitaran la capellanía.
¿Cómo fue la primera vez que entro en una prisión?
Estaba acojonado, totalmente acojonado, si no llegan a cerrar la primera reja echo a correr para atrás, el miedo que tenía era criminal y encima esas rejas de Carabanchel que metían un ruido bestial. Ya no tenía más remedio que quedarme ahí hasta que me abrieran la siguiente reja para seguir entrando.
A un padre no se le debe preguntar nunca cuál es su hijo favorito ¿Cuál es el modulo que más le reconforta visitar?
Estoy muy contento en todos, en todos me reciben estupendamente, pero si tuviera que elegir, elegiría el 5.
¿Es consciente de la influencia que tiene sobre los internos?
Creo que sí, que mis palabras son acogidas con cariño. Y creo que también les ayuda lo que les pueda decir y muchas veces me dicen que ese rato que paso con ellos en el módulo o después de la misa les reconforta, cosa que me agrada, porque eso es que algo se debe estar haciendo.
Su labor no solo es con los internos, sino también con las familias ¿Quién cree que esta más necesitado de ayuda Los internos o las familias?
Son dos formas de ver las cosas distintas, no es la misma situación, esta claro que los dos necesitan ayuda, pero evidentemente quien más está necesitado es el que está dentro de la prisión, porque le falta todo y sobre todo esta privado de una de las cosas más importante que puede haber en la vida, la libertad. Las familias también necesitan ayuda porque no saben exactamente como esta su familiar dentro de la prisión.
¿Qué siente cuando sale cada día de la prisión?
Siento que no he perdido el tiempo, siento que ha habido gente que se ha sentido un poquito mejor, sobre todo que ha sentido un poquito de calor humano, ese calor que no pueden dar ni los muros, ni el hormigón.
Si le dijesen que tendría que dejar de acudir a Soto ¿Cuál sería su reacción?
Pues de cabreo y de revelarme contra todo, me costaría mucho aceptarlo.
“Si me dijesen que tengo que dejar Soto, me cabrearía, me revelaría”
¿Qué siente cuando le preguntan por los presos más mediáticos?
Siento lo mismo que con los otros, ya que como he dicho siempre, para mí son todos iguales, yo no hago ninguna distinción. Indudablemente hay quien necesita más mi ayuda y quien la necesita menos, pero para mí el trato es el mismo, todos son iguales.
¿Con cuantas personas puede haber tratado a lo largo de los años en prisión?
En los 29 años que llevo, si te digo 10.000 o 15.000, a lo mejor me quedo muy corto.
¿Y de esos con cuantos puede mantener contacto?
Mantengo contacto con bastantes, pero con menos de los que ellos quisieran. Me gusta distinguir lo que es la etapa de la prisión y lo que es luego el estar en la calle. Tener un contacto continuo seria recordarles los años que han estado privados de libertad y considero que eso no es bueno para ellos por eso intento no ocurra. Esa es la razón por la que cuando hay gente que me comenta que me va a escribir, le digo que me parece bien pero que yo no les voy a contestar, pero que si van a verme a mí no me molestan.
“Cada noche, cuando salgo de prisión, siento que no he perdido el tiempo”
¿Cuál es la mayor injusticia que ha visto en prisión?
Personas con las cuales se podían hacer cosas, y se las ha dejado tiradas por una tontería que hayan podido cometer en un momento determinado.
¿De no haber sido fraile que le hubiese gustado ser?
Poner un restaurante en Laredo, Cantabria yo siempre lo dije que si me salía de fraile montaría un restaurante. Cantabria es mi segunda tierra y en la zona de Laredo se come muy bien.
